Mantenimiento de Piscinas

Mantenimiento de la Piscina

Cuando hablamos de realizar labores de mantenimiento o limpieza por lo general nos aborda un sentimiento de pesadez y pereza, pero en el caso de realizarlo en una piscina es hasta cierto punto relajante o placentero. Aun así, aunque pueda llegar a ser agradable la tarea, no por ello debemos bajar la guardia ya que puede ser incluso peligroso para la salud de las personas la falta de higiene o no tener en las condiciones adecuada tu piscina. Son varias las tareas o trabajos para tener una piscina acondicionada y en condiciones saludables pero nos vamos a centrar en la calidad del agua y los productos que podemos utilizar para combatir estos problemas:

• Cloración: Se trata de añadir cloro al agua directamente para que realice la función oxidante de las partículas orgánicas que hay en la piscina. Debemos asegurarnos que tenemos el pH regulado 7-7.8) para que sea eficaz la cloración.
• Antialgas: Parte vital para la desinfección del agua una vez que la veamos de un tono verdoso. Será la señal para aplicar una limpieza integral así como la utilización de un cloro algicida, de lo contrario estaremos ante un foco de infecciones.
• Floculante: La acumulación de materia en suspensión sobre el agua de la piscina o el exceso de cal, provoca que cambie su color a un tono blanquecino o incluso turbio. Para abordarlo, se utilizan cloros floculantes los cuales espesan la suciedad en suspensión enviándola directamente al fondo de la piscina donde será eliminada una vez se realice un vaciado de la misma.
• Antical: Tal como comentamos en el apartado anterior, una acumulación de partículas en suspensión puede provocar lo que se llama "agua dura". Este tipo de agua genera problemas a la hora de desinfectar y regular el pH, además de afectar al funcionamiento de los equipos de depuración que la piscina tenga instalados.
• Fungicidas: Debido a la humedad y al calor es posible la aparición de hongos en las diferentes superficies que rodean a nuestra piscina, de ahí la recomendación del uso de chanclas o calzado. Lo podemos combatir con el cloro adecuado.